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Preparación20 min
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Cocinado20 min
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Raciones4
Hoy preparamos helado de galleta oreo estilo sándwich relleno con una crema de nata y queso sin azúcares además apto para intolerancias alimentarias. Especialmente dedicado a los amantes de estas famosísimas galletas pero aún más para los amantes de los helados.
¿Sabes que ya hemos preparado otras veces galletas oreo sinsinsin? ¿Y además tarta de oreo? ¡No te la pierdas! Además de un montón de helados sencillos y ricos sin azúcar y sin necesidad de máquinas especiales.
Todo apto para nuestras intolerancias sin azúcar, ni fructosa y bajo en FODMAPs, he utilizado sucralosa. Un dulce bien fresquito para que podamos disfrutar sin ningún síntoma.
También es sin lactosa y sin gluten, siempre que utilices nata para montar sin lactosa (por ejemplo de Central Lechera Asturiana o de Kaiku) y utiliza una avena certificada sin gluten.
Ingredientes
Galleta oreo
Crema (relleno)
Procedimiento
Preparamos la galleta de nuestro sandwich: Mezclamos los ingredientes líquidos primero. Batimos un huevo, añadimos el aceite de oliva suave o girasol, agregamos la leche y la sucralosa. Removemos bien.
Añadimos ahora los sólidos: el cacao, la harina de avena, los polvos para hornear y una pizquita de sal. Mezclamos todo bien hasta tener una masa que podamos amasar con las manos. Añade una pizca de aceite si fuera necesario para que se integre mejor.
Si la masa la dejamos refrigerar en la nevera durante al menos una hora será más sencillo trabajar con ella. Después la tenemos que poner entre dos papeles de horno y amasarla con un rodillo para estirarla y que quede fina. Con un cuchillo (no necesitas molde) parte en cuadrados o rectángulos, deben tener un tamaño similar porque van a ir una encima de otra para montar ese “sandwich”. Yo los sobrantes los aproveche para hacer 3 galletas que después añadí a la crema.
Colocamos sobre una bandeja de horno y horneamos a 180ºC unos 20 minutos. Después tenemos que dejar que se enfríen nuestras galletas antes de poner el relleno.
Para el relleno: Montamos la nata, añadimos el queso crema, la sucralosa y el aroma de vainilla. Mezclamos y puedes añadir en este punto la galleta que te haya sobrado en trocitos.
Una vez tengas el relleno coge dos galletas del mismo tamaño y rellenalas.
Ahora toca congelar, es mejor si lo haces sobre un plato o bandeja durante un par de horas, una vez estén congelados nuestros helados puedes retirar el plato o la bandeja y apilarlos en una bolsita para congelar.
Cuando las vayas a comer, descongelalas unos minutos antes para que esten más cremosas.
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