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Preparación15 min
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Cocinado5 min
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Raciones8
La mítica comtessa ¡sinsinsin! Sin fructosa, sin lactosa y sin gluten. Y Si te digo ¿Qué solo necesitas tres ingredientes para montar esta deliciosa tarta helada?
Dicen que la comtessa cuando la inventaron era para recrear en helado un milhojas, de ahí sus capas de chocolate superfinas que al comer el helado de nata cremoso destaca con el crunchy. No puede ser más simple pero más rico. ¡Además es sencillísimo!
El truco de esta tarta está en utilizar una buena nata, y cuanto más porcentaje de materia grasa mejor. Cómo edulcorantes ya sabéis que me gusta utilizar dextrosa ya que evita la formación de cristales.
Puedes decorar como más te guste, yo después de desmoldarlo utilice chocolate puro en polvo y unos trocitos de almendra, pero puedes decorar con más chocolate negro. Bien derritiéndolo, cortando virutas (con pelapatatas) o trocitos, otros frutos secos, como más te guste ¡Creatividad al poder!
Ingredientes
Valores nutricionales
Información nutricional por ración
- Valor diario*
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Fructosa: 0 g
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Glucosa: 19,38 g
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F/G: 0
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Calorías: 223,6811%
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Hidratos de carbono: 30,71 g12%
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Proteínas: 3,09 g6%
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Grasas: 10,51 g15%
Procedimiento
Derretimos el chocolate, bien al baño maría o unos segundos en el microondas.
Pintamos en un papel vegetal unas láminas muy finas de chocolate (con 5 láminas será suficiente). Puedes ver el video de instagram como lo he hecho, yo he cortado un papel del tamaño del molde que he ido poniendo debajo del papel vegetal para guiarme y ajustarme al tamaño.
Te recomiendo que estas láminas de chocolate las metas de manera individual en el congelador, ya que a la hora de montarlo será más sencillo si las sacas de una en una y no a la vez, ya que con el calor se derrite enseguida y será misión imposible despegarlo del papel. Si está bien frío no habrá problema de trabajar con estas láminas de chocolate ¡Es sencillísimo!. Al menos debe estar unos 30 minutos en el congelador.
Mientras preparamos la nata. La nata tiene que estar muy fría para que nos monte fácilmente, al menos 24h antes en el frigorífico. La semimontamos con ayuda de unas varillas eléctricas, cuando vaya tomando cuerpo añadimos la dextrosa y terminamos de montar. Prueba entonces el dulzor de la nata por si quieres añadir más edulcorante (encuentro algunas natas más dulces que otras). Reservamos en el frigorífico.
¡Toca montar! Pon papel vegetal sobre el molde que vayas a utilizar para que te sea más sencillo desmoldarlo después. Pon una capa de nata y una lámina de chocolate, ya veras que cuando se congela se despega fácilmente e iremos repitiendo capa de nata-lámina de chocolate. Yo saco las láminas de chocolate una a una del congelador. El calor que había en casa al sacarlas a la vez se derretían enseguida.
Una vez que hemos acabado de montar dejamos en el congelador, toda la noche o al menos 4h. Después desmoldamos y añadimos por encima cacao puro y unos trocitos de almendra.
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