Berenjena a la cordobesa con sirope de arroz

Un plato típico en la cocina andaluza totalmente adaptado para nuestras intolerancias alimentarias, bajo en fructosa, sin gluten y sin lactosa, sustituyendo la miel por sirope de arroz y la harina de trigo por harina de arroz. Y es que tocaba reintroducir la berenjena, después de algún intento hace ya tiempo. Las berenjenas suelen ser de las primeras verduras en reintroducir ya que su contenido en fructosa no es muy elevado. 

Por cada 100g de berenjena cruda tenemos una composición de:

Fructosa: 1,54 g
Glucosa: 1,58g
F/G: 0,97
Sorbitol: Cantidades superiores a 182g presentan cantidades moderadas de sorbitol. 
Fuente: https://www.traditionaloven.com

Te dejo una serie de tips por si todavía no la has incorporado a tu alimentación, ya que las primeras veces que lo intente tuve bastantes molestias, por lo que te recomiendo los siguientes tips: 

Pelar la berenjena. Se habla mucho de las propiedades que tiene la piel de esta, pero gran parte de la fibra de la berenjena se encuentra en su piel. Cuando la hayas reintroducido y la toleres bien es recomendable comerla con piel ya que tiene muchos antioxidantes.

Retira las pepitas si fuera posible, ya que contienen galactanos.

Si es una de las primeras veces que vas a probar a reintroducirla evitar tomar esta con otros alimentos con fructosa, fructanos o galactanos, es decir, intenta no tomarlas rellenas con tomate o zanahoria por ejemplo. Además evitar rebozarlas con harinas con gluten (evitando los fructanos) porque las combinaciones de estos elementos va a hacer una digestión más complicada. 

Nunca comer cruda. Contiene una sustancia tóxica que se neutraliza al cocinarla. Mucha gente dice que la tolera mejor frita que al horno. 

Siempre prueba con cantidades pequeñas y después ve aumentando. Se recomienda no superar los 75g al menos en las primeras ocasiones. Recuerda que cada persona tenemos un grado y una tolerancia distinta a las cantidades y alimentos.